Dandy y guerrero
Después del trabajo estuve con los compañeros bebiendo cerveza en la plaza Dos de Mayo, y a nuestro alrededor sol, movimiento y mujeres lindas ligeras de ropa. Una de ellas vestía prenda semitransparente, dejando entrever areolas de 35mm color oreo. Al no vivir en la gran ciudad y tener que regresar a mi montaña a 50 km pensé «El calor es vida y aquí hace mucho... Siendo tan observador, cuántas cosas me pierdo...»
A la vuelta decido ser protagonista. «Yo también puedo atraer miradas con unas Ray-Ban de Hunter S. Thompson y una excéntrica camisa de Parklife (galgos sobre hombros). Yo también puedo ser estiloso a pesar del tiempo y las tribulaciones...»
Finalmente surge la microrevelación «¿Por qué no te honras a ti mismo, esculpes tu cuerpo, amplías conocimiento, observas sentimientos en lugar de formas? Adquiere pureza, luz, transparencia. ¿Por qué te falta voluntad y decisión para proyectarte sobre tus bajos instintos? Todos esos cuerpos son distracciones y la forma en que los procesas falsas añoranzas. ¡Mira dentro de ti! Conviértete en un Sarpedón, un guerrero en la Ilíada, lo más potente aunque mueras en batalla.»